El bajo consumo de cereales integrales y frutas y el exceso de sal, principales factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares, cáncer y diabetes ligados a la nutrición. 


Una de cada cinco muertes en todo el mundo está causada por una mala alimentación. Las dietas poco saludables ya son responsables de más fallecimientos a escala global que el tabaco o que cualquier otro factor de riesgo, según refleja un nuevo estudio que acaba de publicarse en la revista The Lancet


la investigación, en la que han participado más de 130 científicos de casi 40 países, confirma un cambio de tendencia entre las principales causas de mortalidad: las infecciones y los problemas congénitos cada vez tienen menos peso, al tiempo que aumentan las enfermedades cardiovasculares (ECV) el cáncer y la diabetes. 


Estos párrafos encabezan un artículo publicado en el periódico El Mundo.